AMBIENTES, ARQUITECTURA
Ladrillos de vidrio para separar espacios y ambientes
El ladrillo de vidrio es un material ideal para la creación de muros o semi muros que consigan dividir el espacio de una manera sutil y elegante, sin necesidad de construir paredes robustas que rompan la armonía del entorno. Para crear este tipo de tabiques se pueden utilizar todo tipo de pavés. En el artículo de hoy queremos mostrar ejemplos de muros divisorios para que podáis inspiraros y aplicarlos en vuestros espacios.
Algunos locales comerciales requieren de áreas amplias y abiertas que no incluyan paredes de obra que puedan entorpecer el movimiento de las trabajadoras y clientas. Estos espacios pueden necesitar la incorporación de semi muros divisorios que aporten intimidad en zonas reservadas exclusivamente para las empleadas. Para realizar estas estructuras constructivas es ideal el uso de pavés translúcidos. Estas piezas aportan la intimidad necesaria en los lugares más exclusivos, pero a su vez permiten el paso de la luz, manteniendo la homogeneidad y la amplitud del espacio. Para crear estos tabiques podemos utilizar los bloques de la colección Color Shade, que ofrecen diferentes tonalidades que pueden combinarse perfectamente con el mobiliario del espacio.

Los bloques de vidrio transparentes, como los de la Agua Collection, también son ideales para crear diferentes secciones en un único espacio. La incorporación de estos muros permite mantener la capacidad y la extensión del lugar, consiguiendo que la luz fluya a través de las diferentes piezas de cristal. En definitiva, es una manera perfecta de modificar y organizar el entorno sin necesidad de perder los beneficios que aportan los espacios amplios y abiertos.

Los pavés de cristal también son perfectos para crear paredes en estancias interiores, permitiendo que éstas se adapten al lugar, ya que las piezas de vidrio consiguen unificar estas salas con el resto del espacio gracias a su transparencia y brillo. Por este motivo, para crear estos tabiques recomendamos el uso de bloques semi transparentes, que pueden incluir pigmentación en los bordes de la pieza para aportar elegancia y originalidad al ambiente.

Finalmente, el uso de los pavés para separar ambientes también lo podemos ver en espacios exteriores. Los ladrillos de cristal pueden utilizarse para fragmentar diferentes secciones, como dividir la zona del jardín de la terraza, creando así dos entornos completamente diferentes que se unen a través del color y la luz.

En definitiva, los bloques de vidrio se ajustan a todo tipo de construcciones, ya que pueden ser incorporados tanto en locales comerciales, en estancias del hogar o también en espacios exteriores. Las piezas de cristal se adaptan a las diferentes temperaturas y resisten perfectamente a los cambios climáticos.
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